De "Los Espejos Sonoros" (2014, Editorial 3600)
DEJA VÚ
Estoy buscando el
equivalente sonoro de un espejo
o el estómago de la telaraña,
lo que venga primero.
Es un estorbo no
saber hablar francés con tanto deja vú impenitente:
esa constante
perplejidad mnemónica de encontrarse a uno mismo
cantando las mismas
canciones en escenarios aparentemente repetidos
ante rostros
nebulosos que desafían la rotundidad del negro.
Consagrado a este
sonambulismo -suspensión del pensamiento-
me da exactamente lo
mismo
la espiral del
tiempo que el círculo bonachón del eterno retorno.
No se trata de herir
o ser herido
sino de ser uno con
la sangre
y arremeter contra
el olvido
como la tortuga más
valiente que ha pisado jamás
esta desangelada
tierra.
ALMOST FAMOUS
Hay que preparar al
mundo
para nuestra muerte,
legarle cuadernos y
estudios inconclusos,
nadie nos amará
tanto en esta vida
como nuestros
biógrafos nonatos.
Hay que tirar al
tacho de la basura
nuestras nociones
pueriles de fama y fortuna:
es en la muerte
dónde nos realizaremos
y haremos presentes
nuestros sueños.
Empecemos a tejerles
chambritas
a los pequeños
biógrafos que nos salvarán la vida.
RESCATE BANCARIO
Pobrecitos los
bancos, se estaban hundiendo:
en las piscinas
atemperadas, debajo de la aceituna del martini,
en las playas
privadas de los resorts del pacífico sur.
¿Qué cuentan tus
cuentas,
tus monedas
apiladas,
tus finanzas
aplicadas,
el almidón falso de
tus finas ropas blancas?
Conversarte,
convencerte, conminarte sería un despropósito.
Por eso, banquero,
te deseo una plaga
de langostas a domicilio,
para que sepas lo
que se siente.
Ni te usteo ni nada,
para eso primero tendría que respetarte.
Que tu dinero cobre
vida y se coma tus ojos, tus manos, tus espejos vanidosos,
y tu casita rosada
de barbie.
Que el sol de verano
te explote en la cara
y borre tu falso
bronceado naranja
y tu sonrisa de
plástico
de esta tierra para
siempre.
bonus tracks (haikus)
un haiku también
es un árbol al que
le
florecen moras.
El sonido u-
ne o divide la luz
pacientemente.
Los polvorientos
caminos a casa son
la vía láctea.
Naturaleza:
dos amantes se besan
en la azotea.
No hay retratos:
hay caras prestas a
la
compra y venta.
dentro del mundo
hueco
entre dos cuerpos.
Décimas de sí mismas
Torcida
Flamean banderas, se
inflaman,
se ablandan bandos
aparentes
confunden raudos con
urgentes
se abrazan los que
no se aman.
No queda en pie
ningún buen soldado
con las campanadas
de las catedrales
las calles del
centro ya son basurales
no todos los días
vamos al Mundial,
qué importa si es
lunes, hermano, total
aunque no me
apruebo, soy clasificado.
Ciudad [1]
“gritaban solo para que les entrase mejor la cerveza”
Bohumir Hrabal
Son primos de Martín
Fierro
son hijos de Juan
Cutipa
la sal embota los
dedos
la chela hincha las
pipas.
Las leyes les son
esquivas
las calles les son
propicias
con uniforme ‘e
policía
o con cicatriz de
malo
se abrirá paso a
palos
su alma más muerta
que viva.
Ellos contra ellos
se enfrentan
el “nosotros” se
restringe.
La careta del que
finge
y el que su madre
les menta.
Somos sombras en
discordia
androides de otra
memoria
¿Dónde habita la
emoción
que nos extraerá la
luz?
Que se vayan muerte
y cruz
que dejen vida y
pasión.
Berlín, 2013
De Rimas Arrimadas (2014, inédito)
Yo no soy un decimista
debo dejarlo bien claro
solo busco el amparo
de la rima que me asista.
Esto de leer y escribir
trae golpes y revanchas
la palabra a sus anchas
nos dicta su luz a oscuras
y mano y mente se apuran
para hacerla existir.
La más dulce consonancia
sin ribetes ni ornamentos
es cuando al rimar no miento
y se siente la elegancia
natural, desenfadada
de la poesía sonora
que como una ave canora
traza un vuelo decidido
intenso, pero medido
que te acaricia la espalda.
Es como un juego de cartas
de reinados aparentes
como el sentir de las gentes
que tiene bajas y altas.
Hay rostros que se barajan
uno duerme, otro trabaja
y el juego ganador
es el que gana sin nada
más que la nota entonada,
es el que suena mejor.